En la actualidad, existen personas que tienen una práctica alimentaria poco común: comer caca humana. Este comportamiento, conocido como coprofagia, es considerado peligroso y poco higiénico. A continuación, se detallará más sobre esta práctica.
Personas que comen caca humana
El término “coprófago” se origina de la combinación de las palabras griegas “κόπρος” (kopros = excremento humano), el verbo “φάγειν” (phagein = comer) y el sufijo griego “-o” (agente, indicando quien realiza la acción). Por lo tanto, su significado se refiere a una persona que “come excremento”.
¿Por qué se da la coprofilia?
Existen diversas causas médicas que pueden llevar a la coprofagia en perros, como problemas pancreáticos, deficiencias nutricionales o síndrome de malabsorción, entre otros. Además, ciertas enfermedades como la diabetes mellitus, parasitosis o el síndrome de Cushing pueden contribuir a este problema.
¿Cómo practicar la coprofilia?
La urolofilia y coprofilia. La urolofilia se refiere a la orina y es conocida como ‘lluvia dorada’. La coprofilia se trata de una clase de fetichismo que consiste en la excitación sexual, que producen en algunas personas las heces. Estas personas llegan a obtener el placer al saborear, oler, tocar y presenciar el acto de defecar. Algunos coprófilos practican la coprofagia, la ingesta de las heces.
Las personas que comen caca humana pueden sufrir graves consecuencias para su salud. Aunque no se sabe quién descubrió esta práctica, es importante evitarla y buscar ayuda médica si se ha consumido excremento.