¿Carbon vegetal y activado es lo mismo? Esta es una pregunta común que surge al hablar sobre estos dos productos. Si bien ambos se obtienen a partir de materiales vegetales, hay diferencias significativas entre ellos. Aquí te explicamos todo lo que necesitas saber.
Carbón Vegetal Y Activado Es Lo Mismo?
Los suplementos de carbón vegetal activado se venden como ayuda para aliviar problemas como gases, digestiones pesadas y acidez estomacal, entre otros malestares. Estos suplementos están asociados con la tendencia de desintoxicación y, de hecho, el polvo negro contenido en estas cápsulas tiene propiedades desintoxicantes significativas. Sin embargo, existe el riesgo de que esta actividad pueda tener efectos negativos en la salud del consumidor. Por lo tanto, es importante comprender qué es el carbón activado y cuáles son sus propiedades antes de comenzar a consumirlo.
Según Victoria M Góngora, responsable de Proyectos del Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de la Comunidad Valenciana (Codinucova) y dietista-nutricionista, el carbón común se produce a partir de minas de carbón, madera, cáscara de coco o petróleo.
El carbón vegetal activado es similar al carbón común, pero se obtiene de fuentes vegetales. Los fabricantes lo generan calentando el carbón común con gas, lo que crea poros en su estructura interna. Estos poros permiten que el carbón activado pueda atrapar sustancias químicas.
El carbón activado se comercializa como suplemento nutricional para ser ingerido por vía oral, en forma de polvo, gránulos, cápsulas o comprimidos. También se utiliza en cosméticos para aplicar en la piel, y como colorante alimentario en galletas, helados, pan y otras preparaciones culinarias.
¿Cuál es la diferencia entre carbón activado y vegetal?
El carbón activado tiene la capacidad de atrapar elementos químicos, fármacos, metales pesados, aditivos alimentarios y otras sustancias tóxicas en general. Se obtiene a partir de bosques y raíces calcinadas, aunque también puede ser elaborado a partir de turba, carbón, madera, cáscara de coco o petróleo.
A diferencia del carbón natural, el carbón activado es altamente poroso debido a la presencia de gas. Estos poros son los responsables de la acción del carbón vegetal.
Por lo general, se utilizan maderas blandas como tila, sauce, abedul o álamo en su producción. El carbón activado tiene la capacidad de capturar toxinas, gases intestinales, reducir los niveles de colesterol, prevenir resacas después de consumir alcohol y evitar problemas de reflujo biliar, especialmente durante el embarazo. Además, se utiliza para purificar agua potable y tratar aguas residuales.
El proceso de elaboración de este carbón implica carbonizar la madera mediante la quema a altas temperaturas sin presencia de aire, alcanzando temperaturas de 400 a 700ºC. Luego, se activa añadiendo gas, que puede ser vapor de agua, aire u otros gases generados durante la combustión. Esto crea pequeños poros que confieren la actividad al carbón vegetal.
El carbón activado tiene la capacidad de absorber partículas de tamaño medio. En humanos, se utiliza para eliminar toxinas del plasma y posteriormente son eliminadas a través del sistema digestivo, el hígado o los riñones.
¿Qué otro nombre recibe el carbón activado?
El carbón activado se utiliza como agente adsorbente en el tratamiento de envenenamientos y sobredosis por ingestión oral. Ayuda a prevenir la absorción de sustancias tóxicas en el estómago.
La dosis típica para un adulto es de 1 g por cada kilogramo de peso corporal dentro de la primera hora de intoxicación, con un máximo de 100 g en total. Para niños, las dosis suelen ser de 12-25 g (1 g por kilogramo de peso). En el caso de fármacos con circulación enterohepática como carbamazepina, digoxina, morfina, entre otros, se recomienda administrar carbón activado en múltiples dosis (0,5 g por kilogramo cada 4 horas durante 24 a 48 horas).
Si es posible, se puede combinar el carbón activado con jugo u otro líquido con sabor para evitar su desagradable sabor y así reducir el riesgo de que el paciente lo vomite.
El uso incorrecto de este producto puede causar aspiración bronquial (ingreso a los pulmones) y podría tener consecuencias fatales si no se controla adecuadamente. Para uso fuera del entorno hospitalario, el carbón activado se presenta en tabletas de 1 g o en tubos o botellas de plástico, comúnmente en presentaciones de 12,5 o 25 g, premezclado con agua. Algunos de los nombres comerciales incluyen InstaChar, SuperChar, Actidose y Liqui-Socarra, aunque generalmente se lo conoce simplemente como carbón activado.
En los últimos años, el carbón activado se ha popularizado como un “remedio milagroso” para perder peso, presentándolo como un alimento detox que ha recibido mucha atención mediática y se ha convertido en una moda, con los peligros correspondientes que esto conlleva.
De hecho, la capacidad de adsorción del carbón activado no distingue entre sustancias perjudiciales y beneficiosas, lo que significa que podría bloquear la absorción de ciertas vitaminas y minerales necesarios para el funcionamiento del cuerpo si se consume con frecuencia. Además, un consumo excesivo puede provocar estreñimiento, obstrucción intestinal y otros problemas más graves. A pesar de esto, la Comunidad Europea y la FDA de Estados Unidos lo consideran como un suplemento alimenticio.
Otro uso común del carbón activado es en el blanqueamiento dental. Sin embargo, no hay evidencia científica de que sea beneficioso para este propósito y, de hecho, los expertos señalan que el blanqueamiento se debe a la abrasión de las micropartículas sobre el esmalte dental.
Estas micropartículas, al igual que las sustancias presentes en otros remedios caseros como el bicarbonato de sodio o el jugo de limón, pueden debilitar la estructura del diente y causar daños permanentes en la dentina si se usan regularmente.
¿Qué es el carbón vegetal activado?
El carbón activado cuenta con poros que tienen la capacidad de atrapar sustancias químicas. Normalmente, se administra por vía oral como tratamiento para la ingestión de ciertos venenos. Sin embargo, hay escasa evidencia para respaldar otros usos.
El carbón vegetal puede estar elaborado a partir de turba, carbón, madera, cáscara de coco o petróleo. El carbón activado se produce al calentar el carbón vegetal en presencia de un gas. Este proceso genera numerosos espacios internos o poros en el carbón. Dichos poros permiten que el carbón activado capture los químicos.
El carbón activado se utiliza comúnmente para tratar envenenamientos. También se emplea en casos de colesterol alto, resacas y malestar estomacal. No obstante, la mayoría de estos usos carecen de sólida evidencia científica que los respalde.